domingo, 24 de agosto de 2008

PERMANENTE MANIA


Historia que se acaba
cuando suena la canción;
guardando los recuerdos
de los ecos de tu voz .

Me levanto de tu silla
y sigo hacia mi casa
hecha de arena blanca frente al sol
para clavar mi mente en la edad de la bendición .

Acompañando el piano
los Dioses sus cartas repartieron
y una jugada tan pobre me tocó...
Corrí tras los palpitos de su voz
siendo lo salvaje que soy
sin saber lo que hago
un beso me permitió.

La luna se lleno de tal sabiduria
que en mi piel se gesto.
Frente a la ventana mire el reflejo
de lo que quedó:
Avenidas de pensamientos
que recorren mis venas y
explotan en mi razón.