martes, 11 de agosto de 2015

Desnudez

¿Qué es la desnudez? Alguna vez hace tiempo trabaje en una secuencia fotográfica sobre el cuerpo, la desnudez, la luz, la sombra y los deseos de desnudarse ante sí mismo y  ante un otro. 

 La desnudez va más allá de la piel. Viene de la conexión con los sentidos, con vos… A veces desnudarse es intentar vivir  escribiendo,  y puede ser tan fugaz o tan profundo como un momento en el tiempo. Tres segundos para teclear una letra que deja el renombre del atardecer que causo las ganas de escribir sobre Sofía o Alberto. Desnudarse es crear nuevos espejos para verse frente a frente, tan vulnerable como la primera vez y tan fuerte como la última que sus besos te faltaron.

por eso, escribir se convirtió para mí en una religión, un credo que a través de Cepeda, Cristina, Cerati y el vino tinto en la madrugada se  han convertido en la vocación  de volcar la ingenuidad en placer. A veces me gustaría ser aquella mujer de 19 años que tras un trago de tequila olvidaba  el dolor. Y dejar a esta mujer que tras  años de buscar su Perséfone personal ha  entrado en sus demonios para navegar entre los latidos de cada silencio compartido. Conociéndose y transmutándose día a día , dándose cuenta de su fuerza y calor ,su vulnerabilidad fragmentada que siempre oculto. 





Elegí ser la puta barata de las letras, la que acepta bajar sus pasiones  a cambio de una madrugada de frío  y velas  frente a un pc triturado por la esquirla de los abandonos del día.
Aun me preguntas ¿Qué es la desnudez?- La desnudez es  la mayor ingenuidad y mi manera de vivir, con las emociones a flote de mi cabeza para afuera. Con el pecado entre las piernas, espiando las nostalgias, alegrías y ensangrentados versos compartidos que tras la ventana se pintaron entre los labios-.

Ya no sé si camino entre la adolescencia o la adultez, ya no sé si grito de dolor o de placer . Porque la luna ha menguado o porque el día es gris.

No sé porque  lloro sin razones o me alegro en funerales. Ya perdí la vergüenza de aquellos años , cuando gritar por sexo no era permitido, pedir fuego en la carretera era desbordado y reprimir las emociones era el bien vivir. 

Ya no soy esa niña de 17 que se asustaba al querer amar , ahora puedo levantarme ,desnudarme cada que me venga en gana  y poder continuar. La desnudez es la vulnerabilidad anunciada en un par de tres.