¿ Cúal historia
es más perenne que el mismo mar?
Y el infinito mismo,
desee recordar;
cuando navegué
en los propios silencios
que perduran en el recuerdo,
tu imagén;
sugirió una metamorfosis
al amar.
Un dolor inmenso comprendió
que las mentiras se conviertieron,
en delirios maleficos para mi razón.
El cuerpo quisó temblar
ante el sentimiento mio
de amar.
Y mientras;
vos parecias perenne
pero; tán sólo fuiste un cristal
que se rompió,
en la primera prueba de verdad.
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